El tiempo es un proceso continuo en el cual se suceden acontecimientos que vienen del pasado, pasan por el presente y van hacia el futuro. Irremediablemente, nos guste o no.
En general, no todas las personas disfrutan teniendo que planificar su tiempo o llevando un registro de tiempos, pero hay que tener en cuenta la cantidad de información posterior que esto facilitará.
Al principio nos puede parecer una pérdida de tiempo el tener que anotar el tiempo que estimamos que nos puede llevar una tarea, posteriormente anotar el tiempo al iniciarlas y al finalizarlas; para así poder comprobar la desviación entre el tiempo que pensamos íbamos a necesitar y el realmente necesitado, para posteriormente establecer nuestras recomendaciones para rendir más la próxima vez, o ajustarnos a la realidad y no entrar en las temidas discusiones de, ahora es importante o urgente..
Para poder realizar una mejor planificación, es conveniente tener en cuenta los siguientes puntos:
· Programar las actividades en función de los objetivos que se quieren alcanzar. Lo importante son los objetivos que queremos alcanzar, no las actividades que tenemos que realizar. No se trata de estar ocupados todo el tiempo realizando actividades sino de proceder correctamente.
· Efectuar siempre la planificación por escrito.
Las cosas que dejamos en la memoria se olvidan o no se recuerdan como son.
· Asignar tiempos por actividades.
No querer hacer más de lo que podemos realmente o no dejar
· Dejar diariamente tiempo para imprevistos.
· Diferenciar las actividades urgentes de las importantes.
· Agrupar los asuntos y las acciones relacionadas entre sí.
· Incluir en nuestra programación diaria algunos minutos para pensar y reflexionar.
· Programar las actividades teniendo en cuenta el biorritmo personal.
· Aprender a decir NO “Asertividad” (cuando corresponda)
· Mantener a la vista el plan de actividades diarias.
· Preparar el plan de trabajo del día siguiente, al final de la jornada.
· Eliminar los hábitos poco eficaces.
· Delegar eficazmente
Ya hablaremos más detenidamente de la delegación y por qué se delega menos de lo que es conveniente.
De momento, y aquí necesito la implicación de todos los que leáis este articulo, me gustaría que escribierais en los comentarios, vuestros principales motivos para no delegar, ya que formaran parte de un estudio que estamos realizando
Hola Pilar!
Uno de los motivos para no delegar (al menos para mi), era que no se hicieran las cosas como yo quisiera que se hicieran (que posiblemente, recapacitando… igual no se explicarme, no lo sé). De todas formas, pienso que ahora si que he delegado, pero cuando reviso cosas y veo que no están como yo quisiera….. eso no lo llevo nada, nada bien, me acaba molestando y frustrando. Y aquí empiezan mis diálogos interiores (no me he sabido explicar, no reviso su trabajo con más ainco, no gusta mi forma de hacerlo….. uf!!!) Bueno, pienso que lo mismo con más comunicación, llegaré a la delegación que busco!!
Bsssss
Y actualmwnte
creo que mi problema radica en que soy muy radical y exigente y quiero todo perfecto sabiendo que no existe dicha perfeccion y es asi en todos los ambitos de mi vida.quiero aprender a planificar para tener tiempo para mi y hacer cosas nuevas…..
Y que tal llevas la gestón del tiempo actualmente?, ya que han pasado algunos años y no vi estos correos, lo siento.
Un abrazotee Sandra
DEFINITIVAMENTE NO ME GUSTA DELEGAR PORQ’ CREPO Q’ ESTOY PERDIENDO MI TIEMPO EN ENSEÑAR COMO TIENEN Q’ HACER LAS COSAS
Aunque ha poasadoel tiempop y no vi este correo porque no estaban los comentarios conectados, deseo haya scambiado de opinión. Espero tu comentario.
Un abrazoteee Aleda