7/Nov/2008
Todos sabemos que la comunicación es importante, aunque NO le dediquemos el tiempo necesario para «cuidarla» y «hacerlo mejor», sabiendo cuantos problemas nos ocasiona en el día a día, simplemente por no darnos cuenta del efecto que producen en los demás nuestras palabras, nuestro tono y en muchas ocasiones nuestros gestos y expresiones; es decir nuestra comunicación no verbal, y que posteriormente somos nosotros mismos los que sufrimos sus efectos y consecuencias, que con un poco de cuidado y atención podríamos haber evitado.
¿Te has dado cuenta de ésto? Pues te va a resultar mucho más facil cuando te cuente las distintas formas de aprender que tenemos. Unas veces aprendemos por imitación, otras por prueba y error y otras realizando el siguiente proceso de aprendizaje, que cuando lo leas, veras que es más fácil de lo que puede parecer a simple vista.
Recuerda cuando ves a alguien realizando algo y lo primero que piensas y a veces dices: «eso lo puedo hacer yo«, en ese caso, aunque suene un poco duro, no es tan duro como cierto, en ese eres: INCONSCIENTEMENTE INCOMPETENTE
Después cuando te pones a hacerlo, primero ves que no era tan fácil como pensaba y en ese momento te conviertes en:
CONSCIENTEMENTE INCOMPETENTE
Aunque te suene duro no te lo tomes a mal y sigue leyendo, te sorprenderás .
Aquí, DECIDES y ELIGES, como en tantas ocasiones en tu vida, pues aunque en el fondo creas que tienes poca libertad de elección, (ya iras viendo que no es así, que lo que te cuesta realmente es asumir la responsabilidad de las decisiones que tomas y por eso en ocasiones casi prefieres pensar que no eres libres para ello), te lo contaré poco a poco.
Volviendo a la situación en este caso, puedes decidir no aprender y contratar a un profesional o pedirle a alguna persona amiga que te ayude o que lo haga. En ese caso eres consciente de que no sabias ni quieres saber hacerlo, O puedes decidir APRENDER. En este caso, sí se produce proceso de aprendizaje. Y te dedicas a ello con interés y constancia practicándolo durante cierto tiempo, dependiendo de la dificultad que entrañe y de lo habilidosa que seas. Y en ese momento te conviertes en:
CONSCIENTEMENTE COMPETENTE
Y cuando ya lo llevas haciendo cierto tiempo, y lo haces más o menos bien, (tampoco hay que pretender ser perfectos, pues de esto ya te contaré mucho en otro artículo, ya que en muchas ocasiones, cuando te conviertes en perfeccionista, te das cuenta de que es uno de los motivos más frecuentes de estrés y tensión o desgaste). Te sientes:
INCONSCIENTEMENTE COMPETENTES.
Aquí tienes que prestar atención y seguir siendo consciente de ello, pues sino el exceso de seguridad y el olvidarte de la importancia de lo que estas realizando, te haría volver a ser Inconscientemente incompetentes y ya no por desconocimiento como sucedía al principio, sino por exceso de confianza en ti misma y rutina, como sucede muchas veces con los accidentes de circulación, que no siempre los tienen personas con poca experiencia, sino que en un alto porcentaje según viene comentando la Dirección General de Tráfico, los tienen personas que llevan mucho tiempo conduciendo.
Para realizar este proceso de aprendizaje de una forma adecuada, es importante que tengas en cuenta una serie de ACTITUDES que intervienen en ellos.
En el primer paso te puedes sentir «FELIZ», aunque es la felicidad de la inconsciencia, «la de no saber que no sabes», la felicidad a la que se refería el famoso escritor del siglo XVIII Schopenhauer, cuando decía «Si quieres ser feliz como me dices, no analices muchacho no analices» (www.schopenhauer-web.org)
En el segundo proceso, necesitas una dosis de «HUMILDAD», para reconocerte, al menos a ti misma, aunque esto a veces puede resultar algo más difícil, que no es tan fácil como pensabas y que no sabes o que te cuesta hacerlo. Y aquí de nuevo vuelves a decidir, «me quedo sin saber hacerlo y/o contrato un profesional o pido ayuda» o aprendo a hacerlo.
Posteriormente necesitas una gran dosis de CONSTANCIA, pues para hacer algo bien, hay que hacerlo más de una vez y siendo consciente de lo que realmente se está haciendo, y no hacer las cosas por hacerlas.
Aquí recuerdo la contestación el famoso jugador de golf Arnold Palmer, cuando una vez metió una bola dificilísima y una persona le dijo «Qué SUERTE tienes tío» y él contestó «Sí, he observado qué cuanto más me entreno más SUERTE tengo» www.arnoldpalmer.com)
Y al final llegas a la «SATISFACION» que te produce el haber aprendido a hacer algo nuevo.
Aquí es importante que sigas siendo consciente de lo que haces para no volver al inicio otra vez.
Clave de coaching: ¿Qué es lo que más te cuesta aprender?.
Espero tus comentarios.
Deja una respuesta